Estados Unidos creció un 2,3 por ciento a ritmo anual en el segundo trimestre, después de un primero en el que también se ha revisado la cifra de negativa a positiva. Esta aceleración se debe a un consumo dinámico de los hogares y un relanzamiento de las exportaciones. Los datos del departamento de Comercio son ligeramente inferiores a las previsiones de los analistas, pero alejan las dudas que se tenían sobre la economía estadounidense tras un nuevo invierno inicialmente en rojo.<br /><br /> La última revisión del primer trimestre hace pasar el Producto Interior Bruto del país de un 0,2 por ciento negativo a un 0,6 positivo. En el segundo trimestre, la neta aceleración proviene de un aumento del consumo de los hogares en casi el tres por ciento y unas exportaciones que se dispararon al cinco por ciento tras haberse hundido por la apreciación del dólar.<br /><br /> Con estos datos, la Reserva Federal estadounidense tiene elementos para empezar a subir los tipos de interés. Algo que decidió posponer en la
